El 20 de diciembre de 2000, la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 55/201 proclamó el 22 de mayo como el Día Internacional de la Diversidad Biológica. En esta fecha se quiere incidir en la Conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica que es un reto para la sociedad en su conjunto, y requieren el apoyo, la colaboración y la participación de todos los actores sociales y económicos. Todos y cada uno de nosotros, a nivel individual y colectivo, pueden y tienen el deber de contribuir a este propósito común, que se traducirá en el bienestar de nuestra sociedad y de las generaciones futuras.