El rol del marco normativo en esto es fundamental. La legislación debe orientar nuestro desarrollo favoreciendo e incentivando una economía baja en emisiones y, a la vez, desincentivando progresivamente aquellas fórmulas que no contribuyen con la construcción de un crecimiento económico duradero. La legislación debe ayudar a defi nir la política y mejorar el entendimiento sobre este tema, así como asignar roles y responsabilidades. Para ello la comunidad internacional, a través de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, debe promover una adecuada asignación de recursos financieros para esta gran tarea y cada nación adecuar su sistema legal para fomentar procesos de mitigación y adaptación a los eventos climáticos.