La participación de la escuela, a través de la implementación del Programa Curricular Regional de EducaciónSanitaria y Ambiental (PCRESA), contribuyó al logro de los objetivos de la educación sanitaria durante la intervención integral. En la fase posterior, el rol de la municipalidad y del personal de los establecimientos de salud fue clave para consolidar los comportamientos saludables en las familias. De esta manera, la educación sanitaria se constituye en un elemento básico para mejorar las condiciones de salud y calidad de vida de la población, en la perspectiva de garantizar la sostenibilidad de los servicios.